Efectos colaterales del terror en Oslo

Estos útlimos 6 días me he sentido horrible. Nunca me había afectado tanto un atentado terrorista. Siempre nos llegan noticias de muertes, masacres, coches bomba y demases, pero esas cosas siempre pasan "allá" no "acá".

Puede ser que porque pasó en Noruega me siento tan mal. Puede ser porque justo me tocó vivir al lado del hospital donde han llegado las víctimas. Puede ser porque he visto como quedó el centro, por donde pasaba y paso todos los días y siento pena y terror. Puede ser que ya no me sienta segura ni en el país que me vio nacer, que se supone era uno de los más tranquilos y pacíficos del mundo. Puede ser porque me parte el corazón la manera en que murió la gente y que las víctimas hayan tenido entre 14 y 61 anios, o sea ninguno era "viejo" al momento de morir y es tan injusto. Puede ser porque he leído las historias que salen en la prensa y en algunos blogs sobre las atrocidades que vivieron jóvenes y ninios en Utøya. Puede ser porque cada vez que publican una lista con fallecidos confirmados entro a ver sus fotos. Y sonreían, sin ninguna idea de lo que les esperaba.

A veces me cuesta quedarme dormida. He hecho esfuerzos por no llorar, porque siento que este dolor no me pertenece, porque nadie que yo conocí murió, pero sigo sintiendo la misma pena que sentiría si alguien a quien yo amo tuviese que morir de esa manera. No se si me entienden.

He leído las historias de la gente que murió en la explosión en Oslo por ejemplo, y me he dado cuenta de lo horrible que pueden ser las coincidencias. Por ejemplo un hombre de 32 anios, la misma del asesino, había abierto hace poco su propio bar y pasó a comprar mercadería para su bar y justó lo pilló la explosión. O la seniora de la edad de mi mamá que no consigió que le entregaran su bicicleta para el día viernes antes del mediodía y se tuvo que ir por otro camino para tomar el metro. Si hubiese tenido su bicicleta, se hubiese salvado. O la familia que huyó de Irak, porque querían que sus hijos crecieran en un país seguro y lejos de los atentados y las bombas y la guerra, pero que justamente aquí, en el país más tranquilo de Europa, perdieron a su hija porque a un loco psicópata se le ocurrió dispararle.

Pienso en los que más quiero. Me imagino en la misma situación. O sea yo me muero, no sé qué haría si a mi novio le pasara algo. Sin él me muero, él es una de las personas más importantes para mí. Por una parte me siento tan afortunada de tenerlo a él y que nada nos haya pasado. Me hace ver como debemos valorar a quienes tenemos mientras ellos viven, porque nadie sabe cuando se pueden morir. Yo sé que suena cliché, yo misma lo he pensado siempre, pero es tan cierto. Se vuelve mucho más cierto ahora.

No puedo dejar de pensar en el odio que existe. Ese odio que algunos cultivan y que nos ha llevado a esto. Cuántos más hay allá afuera con la misma cantidad de odio en sus cuerpos? Veo las fotos del asesino cuando era un ninio e iba al colegio y siento pena por ese ninio, que en algún momento de su vida tuvo un quiebre, que después de ser un ninio feliz y con muchos amigos se tranformó en un psicópata narcisista y lleno de odio. A veces siento odio por él y deseo que se pudra en el infierno. Pero también me he dado cuenta que no es necesario tener sed de venganza sino que de justicia. Que pase el resto de su vida en la cárcel y que sea olvidado. Que la gente en realidad piense en las víctimas y no gasten sus energías en tener malos sentimientos contra él. Mejor sentir amor por los que se fueron y que no murieron en vano.

Cada una de las personas que murieron el viernes son una historia por sí mismas y tienen familia, amigos y conocidos. Es como si cada uno tuviera su forma de ser extraniado y llorado pero a la vez es la misma forma, me entienden? o sea cuando veo los mensajes de condolencias que les dejan veo que todos sienten lo mismo, sienten pena, incredulidad, "te echaremos horriblemente de menos" y cada uno es una historia por sí mismo: "Me acuerdo que te ví la semana antes que murieras y me dijiste tal y tal cosa". A alguno le han escrito: "Espero que estés bailando en el cielo como siempre lo hiciste aquí" o "Estoy seguro que conocerás a Kurt Cobain, John Lennon, Jimi Hendrix y a todas esas personas geniales que tanto admirabas". Da mucha pena, de verdad, da la sensación de perder a alguien a quien conociste.

No he dejado las noticias de lado y sé que no es sano, pero siento como si tengo que pasar por este "duelo". No sólo el duelo de Oslo y el resto de Noruega, sino de poder algún día sentirme segura otra vez. Yo no le tengo miedo a mi propia muerte, pero le tengo terror a la muerte de otro y quiero dejar de sentir que la gente que amo es vulnerable. Quiero más bien pensar que aunque algún día vamos a morir, podemos sentirnos satisfechos con lo que hemos hecho estando vivos y como hemos disfrutado el tiempo con quienes amamos.

Ojalá que las cosas vuelvan a la normalidad. Poco a poco los noticieros van mostrando otras noticias también y el centro va volviendo a la rutina.

Hay que pensar en otras cosas también, porque aunque es horrible que gente haya muerto, la vida de los que quedamos continúa y hay que seguir viviendo. Hay que pensar en cosas positivas también.

El momento feliz del día de hoy fue que compramos departamento y hemos firmado el contrato hoy. Pronto nos vamos de esta ciudad! YEY :)

Espero que ésto nos sirva de lección en muchos aspectos:
1.-NADIE tiene la vida comprada, ni siquiera los que aún estamos jóvenes.
2.-Por eso hay que valorar lo que tienes mientras lo tienes, porque de un segundo a otro se puede ir! Nunca van a ser demasiadas las veces que les digas a alguien que lo amas! :)
3.- Nadie saca nada, NADA, con odiar a NADIE. Tenemos que usar las energías que tengamos en buscar unión y consuelo y carinio en otros.
4.- Nadie está a salvo de que un piano le caiga en la cabeza, un camión lo atropelle o un loco desquiciado explote una bomba que mate a varios. Sin embargo lo menos que tenemos que hacer es vivir sintiendo miedo, creo yo. Si la muerte te llega un día, te llega. Por eso reitero punto 1 y 2. No tenemos la vida comprada, tenemos que disfrutar lo que tenemos mientras podamos y tenemos que vivir la vida, no evitar vivir por temor a que algo nos pase.


Ya sé que estuvo cursi el post de hoy, pero me ha servido para descargarme y dejar un poco de lado los pensamientos que me molestan y los sentimientos negativos y a lo mejor concentrarme en cosas más positivas.

Espero que las familias de los fallecidos encuentren consuelo y aprendan a vivir con su pérdida. Como muchos ya han dicho: "Ninguno de ustedes (que murieron) han muerto en vano, ni serán olvidados. Ustedes creyeron en una sociedad mejor y nosotros vamos a luchar por cumplir aquello"


P-S: Para esos días en que la muerte es un tema está esta serie: "Six Feet Under". Es la mejor que he visto en mi vida. A veces pensamos tanto en la muerte pero nos olvidamos de vivir. Si tienen oportunidad de verla, háganse un favor de por vida y véanla, debería ser obligatoria.

Trailer:

La mejor intro: